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Los alumnos del programa “Ecoescuelas Litorales” visitaron ayer el Molino del Saltaor y su entorno, acompañados por el concejal de Educación, Francisco Clemente, y por el director técnico del Club Náutico, Pedro Juan Pérez-Castejón, junto a los monitores de estas actividades extraescolares.

Los asistentes tuvieron la oportunidad de conocer la historia y funcionamiento de esta infraestructura, un antiguo molino que utilizaba como fuerza motriz para el movimiento de sus amoladeras el curso continuo del agua, recogida a través de una balsa situada a 17 metros de altura, desde donde caía hasta chocar con una hélice que al girar accionaba las piedras que machacaban el trigo, convirtiéndolo en harina. Todo esto, diseñado con un sistema de retorno de agua, para que pudiera seguir funcionando en tiempos de sequía.   

Este programa de actividades tiene como objetivo fomentar en el alumno una curiosidad por su identidad y apreciar la importancia de los valores básicos que enriquecen a Águilas, su litoral y su diversidad, para obrar con respeto, mediante la comprensión del entorno en el que convivimos.

Desarrollar la relación con el hábitat natural y contribuir activamente a la defensa, conservación y mejora del medio ambiente, es otro de los propósitos de esta iniciativa en el que participan más de 200 escolares de Educación Primaria.

Entre los fines de “Ecoescuelas Litorales”, que promueve la concejalía de Educación y el Club Náutico de Águilas, se encuentra también conocer el patrimonio natural, a través de visitas a puntos de especial interés, y la navegación a vela, realizando un acercamiento al medio y su sociedad, desarrollando una actitud de interés y respeto hacia el ejercicio de este derecho.

La metodología empleada en estas actividades extraescolares hace posible que los alumnos aprendan a la vez que se divierten, asistiendo a visitas guiadas, talleres y excursiones, que se complementan con trabajos didácticos en el propio colegio.

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